La Corte de Apelaciones de Valparaíso acogió un recurso de protección en favor de la libertad de asociación de un alumno al que se le había negado la solicitud de desafiliarse personalmente de la federación de estudiantes de su universidad. Este es un fallo que ciertamente causará precedente. Por primera vez en Chile el movimiento estudiantil deberá comenzar a respetar un derecho reconocido en todos los pactos de derechos humanos del planeta y, por cierto, en todas las demás organizaciones gremiales del país. Con esto, por primera vez en la historia de Chile comenzará a resultar relevante para quienes dirigen una federación el hacer sentir parte y realmente representados a quienes dicen representar.

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